Mucha precaución y sentido común: siempre es la mejor protección
- Al salir de casa conviene no olvidar puertas ni ventanas abiertas, y girar por completo la llave para garantizar que la cerradura cumpla su función.
- Nunca "escondas" la llave en el exterior (bajo el felpudo, una maceta, etc.), es mejor que dejes una copia a alguna persona de confianza.
- No abras la puerta a desconocidos. Desconfía de los servicios técnicos que se presenten sin avisar y, antes de abrir la puerta, usa siempre "filtros" como el portero automático, la mirilla o la cadena de seguridad.
- Si tienes previsto ausentarte durante un tiempo, asegúrate de dejar todos los accesos bien cerrados.
- Sé discreto al comentar la ausencia, y pide a los tuyos que lo sean: evita dar detalles en las redes sociales o comentarlo con gente que conoces poco. Sin embargo, es buena idea comunicar a los vecinos más cercanos que no estaremos en casa, para que sospechen si ven algún movimiento extraño.
- Toma medidas para dar la impresión de que la casa está ocupada (por ejemplo, pide a alguien de confianza que vacíe el buzón de correos o, mejor aún, instala un programador electrónico para activar a determinadas horas algunas luces, el televisor, etc. y que parezca que hay alguien).
Protege los accesos
Poner las coas difíciles ayuda. Podemos entorpecer el acceso a la vivienda si colocamos unos elementos de seguridad de calidad en los accesos (puertas blindadas, rejas en ventanas, etc.) y un buen sistema de alarma. Los elementos mecánicos nos ayudarán a dificultar la entrada de posibles intrusos, mientras que la alarma avisará cuando el allanamiento se haya producido.
Unos consejos para reforzar tu casa:
- Refuerza las puertas de acceso, tanto en la hoja como en el marco. Hay puertas de todo tipo: desde madera maciza hasta blindadas o acorazadas, con el interior y una o dos planchas de acero.
- Instala también una buena cerradura que cuente con varios puntos de anclaje y cilindro de seguridad con escudo antitaladro. Si su cerradura tiene sólo un punto de anclaje, es recomendable disponer de un cerrojo adicional.
- Algunas puertas cuentan con otros elementos de seguridad como el cerradero, una pieza metálica insertada en el cerco por donde encajan los pestillos cuando se gira la llave.
- Los ladrones también suelen acceder a la vivienda rompiendo los cristales y los marcos de las ventanas. Existen distintos sistemas de bloqueo con cerrojo según el tipo de ventana, también disponibles para persianas.
- Los cristales más resistentes a veces salen muy caros. Como solución intermedia, se puede instalar un cristal con doble capa o con película protectora. Las rejas y barrotes ofrecen muy buena protección, pero suponen un obstáculo de salida en caso de emergencias.
Cada vez se instalan más alarmas
El número de los hogares que cuentan con sistema de seguridad electrónica crece poco a poco. Es importante colocar los elementos del sistema de alarma de la forma más adecuada, según la distribución de las habitaciones y las costumbres de los habitantes de la casa.
- Los teclados para activar y desactivar el sistema se colocan en la zona de acceso y suelen funcionar con un retardo suficiente para que el usuario tenga tiempo de desactivar el sistema. Es recomendable contar con un código de coacción, ya que en caso de que se vea obligado a desactivar el sistema, la empresa de seguridad podrá actuar sin que los ladrones se percaten.
- La central del control es la que recibe y procesa las señales, y pone en marcha el aviso de alarma. Se suele colocar en lugares discretos, cerca de una conexión eléctrica y telefónica.
- Los detectores deben estar bien ubicados para cubrir correctamente todas las zonas del inmueble. Estos equipos electrónicos captan las anomalías de movimiento, rotura de cristales e incluso algunos llevan cámara incorporada.
- En viviendas grandes o con varias plantas es importantes realizar una "zonificación", es decir, determinar distintas zonas que puedan ser activadas de forma independiente, para, por ejemplo, mantener activados los sensores de noche sólo en algunas áreas.
Encontrarás detalles en Un hogar a prueba de ladrones.Com
El mantenimiento del sistema de alarma es tan importante como su correcto diseño. Requiere al menos una revisión anual. Las centrales de control de alarma tienen un sistema bidireccional, es decir, que emiten señales a la empresa que gestiona la seguridad, pero además, un operario puede realizar comprobaciones de la casa desde la empresa para verificar su correcto funcionamiento.
Además, existen sistemas con los que el propio usuario puede controlar la central a través del móvil. Si te decantas por uno de ellos, cerciórate de que cumpla con la normativa de calidad EN 50131.
Invierte en seguridad
Reforzar la seguridad de tu vivienda cuesta dinero... pero puede salirte a cuenta. Una buena puerta, ventanas de calidad, cerraduras de seguridad, etc. son una inversión que se amortiza si se observan unos prinicpios básicos de prudencia.
Si te decantas por un sistema de seguridad electrónica, puedes acogerte a a alguna de las ofretas, que proliferan en los meses de verano, pero lee antes la letra pequeña, para no llevarte sorpresas al final.
Las empresas de seguridad suelen visitar primero la vivienda para detectar las necesidades concretas y poder ofrecer un presupuesto acorde.
Fuente: Ocu.Org